Ayer, día 4, aparte de celebrar el cumple de la Constitución, también hicimos unas actividades para conmemorar el día de la discapacidad. Tuvimos la oportunidad de ponernos en la piel de muchas de las personas ciegas que hay entre nosotros, y descubrimos que no somos diferentes. Todos podemos hacer las mismas cosas si tenemos voluntad.
Un ejemplo de actividad fue el recorrido de un circuito en el que por parejas, un compañero/a con los ojos vendados era guiado por el otro hasta llegar al final de este.
Otra de las actividades fue el lanzamiento a canasta, también con los ojos vendados y con la guía de un compañero o de la seño Rosi.
Con ellas hemos aprendido a valorar lo que tenemos y a ser más respetuosos con los que no lo tienen.
¡Gracias seño!
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Valórame por mis capacidades, no por mi discapacidad |
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